Guabirá se complicó de entrada en el torneo Clausura. Cayó de manera inesperada en la apertura del certamen ante un rival considerado, a priori, accesible, como La Paz Fútbol Club, que le pintó la cara en la mismísima Caldera del Diablo.Esta vez “la furia” no habitó la cancha, se instaló en las tribunas. Los hinchas del equipo azucarero reaccionaron con improperios dirigidos al técnico Marrupe y sus dirigidos por la falta de respuestas ante un adversario que se mostraba mucho más práctico y efectivo.
La Paz provocó la furia con su pragmatismo. Se fue al descanso en ventaja y amplió a tres la diferencia con dos goles tempraneros en el complemento.
El enojo de los hinchas locales hizo reaccionar a los azucareros pero no fue suficiente para cambiar la historia del partido, apenas sirvió para descontar y quedar 2-3.
Los azulgranas se fueron en paz y dejaron a los hinchas del rojo hechos una furia.
* Foto del diario La Razón.
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