Brasil y Paraguay fueron demasiado para Costa de Marfil y Eslovaquia. Impusieron su mayor peso futbolístico y lograron victorias fundamentales que a los brasileños les otorgan el pase a la próxima ronda y que alos guaraníes los dejaron en el umbral de la segunda fase.El scratch mejoró en relación al debút. No fue el equipo que deslumbra, pero sí fue un onceno con argumentos. Sólido en defensa, buena recuperación en el medio y con destellos de calidad en el ataque.
Todo esto tuvo que ver con la seguridad del arquero Julio César, el liderazgo de Lucio, el temperamento de Felipe Melo, la categoría de Kaká y la categoría de Luis Fabiano. La recuperación de Kaká, que aún no alcanzó el gran nivel de otras temporadas, y la presencia inquietante de Luis Fabiano, que no había tenido un buen estreno en el Mundial, fueron determinantes para la clara y justa victoria brasileña.
Paraguay jugó un buen primer tiempo y sacó la ventaja decisiva ante Eslovaquia en esa etapa. El argentino naturalizado paraguayo Barrios armó una gran jugada con Vera, quien definió con clase ante el arquero europeo. Los protagonsitas de la jugada del gol fueron los mejores del cuadro guaraní, que desmejoró en el complemento pero mantuvo el control del encuentro.
Holanda volvió a dejar sabor a poco en su triunfo frente a Japón, como en la victoria frente a Dinamarca. La otrora admirable naranja mecánica fue hasta ahora una naranja insípida.
En ese mismo grupo, Dinamarca y Camerún fueron protagonistas del mejor partido de esta Copa del Mundo. Ambos tuvieron la posibilidad de ganar, al final vencieron los daneses porque estuvieron más certeros de cara al arco rival.
* Foto de 20minutos.es
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