La Copa Paz del Chaco se quedó en Paraguay, pero Bolivia se trajo en la utilería cosas importantes para esta etapa de formación de un nuevo equipo, que alientan respecto al futuro próximo.
No perder es siempre importante, porque ayuda a fortalecer el ánimo y la confianza, mucho más cuando las cosas no salen como uno pretende. Por esa razón el empate ante un adversario fuerte como el paraguayo, sirve.
Pero hay algo más valioso, y es la mejoría que mostró el seleccionado boliviano en relación al partido de ida y a amistosos anteriores, en sectores en los que evidenciaba una fragilidad alarmante.
Anoche, tuvo mayor solidez defensiva, fue más agresivo en la obstrucción en el mediocampo y, por momentos, buscó el arco contrario con determinación. El arquero Arias impidió un par de caídas, es cierto, pero la zaga central cometió pocos errores, los volantes se prodigaron más y adelante también hubo sacrificio.
Cuando en un anterior post nos referimos que no habría mejoría como equipo sin un crecimiento individual, quedó en claro ayer. El mejor rendimiento de cada jugador repercutió en el funcionamiento colectivo.
Arias tuvo un buen partido. Raldes fue el líder que se espera, sólido. Rivero lo secundó muy bien, sin distracciones. Álvarez mostró que puede aportar oficio, y salida. Gutiérrez ratificó su buen momento. Firme en la marca. A todos ellos, lo único que les falta es ser más simples en la salida, no complicarse inútilmente con la pelota.
Robles, bien, regó la cancha con su despliegue. Flores no me termina de convencer. Nacho García puede jugar mejor y mucho más últil. Está "peleado" con la pelota. A Jhasmani Campos no se lo sintió. Edivaldo Rojas quiere ser útil y puede serlo. Se sacríficó ayudando a presionar la salida, es rápido y simple para jugar.
A Martins le tocó otra vez el papel de llanero solitario, y cumplió. Está pagando el precio de su inactividad en el Shakhtar, le cuesta dominar la pelota y la pierde fácil. Con un poco más de tiempo y compañía, puede andar mejor.
José Luis Chávez y Ricardo Pedriel alternaron y no lo hicieron mal. El volante le dio más vitalidad al medio y el atacante aportó algunas cosas interesantes, demostrando que es una opción válida que necesita más tiempo en la cancha.
Tiempo al tiempo. La idea de juego está clara y los jugadores pueden dar mucho más. Ayer, dieron un paso al frente.
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