Oriente ganó el partido que tenía que ganar para entusiasmarse con la posibilidad de conquistar el título del torneo Clausura.Aprovechando las virtudes de sus hombres-gol, Gualberto Mojica y Alcides Peña, se impuso a un destartalado Bolívar en el estadio Hernando Siles.
Mojica encendió la llama de la esperanza al iniciarse el segundo tiempo de un partido que estaba obligado a ganar, colocando la pelota junto a la base del palo, lejos del alcance del argentino Arguello.
Cuéllar, uno de los varios promocionados por el cuerpo técnico de Bolívar, apagó, por un momento, el entusiasmo con un cabezazo que emparejó las cifras.
El partido estaba para cualquiera porque las defensas otorgaban muchas ventajas, pero los ataques no acertaban y el partido se encaminaba a un final sin vencedores ni vencidos.
Se jugaban los últimos minutos cuando Peña decidió intentar hacer prevalecer su habilidad. Encaró, le hizo el túnel a un zaguero celeste y definió ante Arguello. Golazo para un triunfazo.
Oriente alcanzó a Blooming en el segundo lugar, no depende de sí mismo, pero tiene chances de ser campeón. De esa manera abrió las puertas a la ilusión.
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