A Oriente Petrolero puede pasarle lo que le ocurrió hace poco, cuando perdió a jugadores claves y debió armar nuevamente la base de su plantel para afrontar los torneos.
En cuestión de un año se alejaron de Oriente Mauricio Saucedo, Jhasmani Campos, Juan Carlos Arce, Luis Gutiérrez, Joselito Vaca, el uruguayo Peinado y se lesionó Alejandro Schiapparelli.
Con essa base armó un buen equipo, que jugó muy bien bajo el mando del argentino Ariel Cuffaro Russo y estuvo a punto de ser campeón, dominó y lideró el campeonato Adecuación toda la primera rueda y buen parte de la segunda, pero, inexplicablemente, se desmoronó al final.
Los dirigentes iniciaron el desbande destituyendo a Cuffaro Russo, considerándolo culpable de la situación, sin tener en cuenta el desgaste que ocasiona disputar el certamen local y la Copa Libertadores al mismo tiempo.
La decepción los llevó a actuar sin sentido común y a cometer la injusticia con Cuffaro Russo. Después actuarían distinto. A Carlos Ramacciotti le renovaron el contrato pese a que Oriente no fue campeón y empezaba a jugar mal, y Erwin Sánchez continuará pese a que algunas derrotas y empates de local le privaron de otro título.
Darle continuidad de Sánchez es actuar con coherencia porque realizó una buena labor. Le aportó una idea definida de juego al equipo, unió el grupo, recuperó jugadores y transmitió una mística ganadora.
Hoy, es un hecho que no continuará el paraguayo Francisco Argüello (le interesa a Juan Aurich de Perú) y la mayoría del plantel quedó en libertad de acción al haber finalizado sus contratos con la entidad albiverde: el arquero Hugo Suárez, los zagueros Miguel Hoyos, Wílder Zabala y Mariano Brau, y los mediocampistas Marcelo Aguirre y Santiago Raymonda.
No están en los planes el peruano Piero Alva, y los cochabambinos Roberto Galindo y Walter Veizaga. Ante la partida de Alva y Galindo tiene que pensar nuevamente en varios atacantes para reforzar un sector en el que solo tiene a Alcides Peña y al juvenil Vargas.
El problema, si no logra renovar el contrato con varios, es conseguir a los reemplazantes tanto nacionales como extranjeros. Hay pocos valores bolivianos para elegir debido a la falta de promoción que se acentúa año tras año y los foráneos prefieren mercados futbolísticos más lucrativos.
La habilidad de los dirigentes y los recursos económicos tendrán mucho que ver para que Oriente no sufra el desmantelamiento de su plantel y se vea obligado a empezar casi de cero el armado de un nuevo equipo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario