Blooming venía de aplazo en aplazo, pero esta vez aprobó con un triunfo, poniendo freno a una racha negativa que empezaba a generar decepción y preocupación en el campamento celeste.
La academia había reprobado con la Universidad Católica de Chile quedando eliminada de la Copa Sudamericana, sin embargo se tomó revancha con Universitario por el torneo Apertura de la Liga.
Una buena actuación del atacante franco argentino Hugo Bargas le permitieron imponerse a la “U” en un partido en el que fue el dominador de las acciones, con un primer tiempo flojo y una segunda etapa de mejor rendimiento.
Bargas fue el más ambicioso e incisivo, generó las principales situaciones de peligro y abrió el marcador en el completo con un lindo gol: le ganó la posición a su marcador dentro del área, acomodó el cuerpo, y sacó un zurdazo junto al palo del golero uruguayo Elduayén.
Después le llegó la chance a Oscar Díaz, que sustituyó al argentino Sacripanti, de pobre tarea. Una buena triangulación ofensiva terminó en gol del chapaco: Verduguez recibió por izquierda, envió un centro bajo al primer palo y apareció Díaz. 2-0.
Blooming jugó cómodo porque Universitario no lo exigió. La defensa, su talón de Aquiles, no pasó apuros por ello. A Melgar se lo vio más seguro en el lateral derecho. Méndez perdió su lugar por los errores cometidos en los últimos partido y en su lugar jugó Candia, de aceptable labor.
En el mediocampo, lo mejor fue Chávez, que trabajó con criterio, apoyando en la creación y en la recuperación de pelota. Loayza apareció muy poco, casi nada. A Segovia le falta soltarse, jugar con más ambición.
Y arriba, lo señalado. Bargas fue el mejor del partido. Hizo un gol y generó situaciones. Sacripanti no gravitó.
Blooming ganó con merecimientos, aunque dejando la sensación de que es un equipo en el cual existen muchas libertades y pocas obligaciones dentro de la cancha, y eso tiene un precio, un onceno light.
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