ORIENTE, IMAGEN Y SEMEJANZA DE TUCHO

Oriente se pareció mucho, anoche ante Blooming, a lo que era Víctor Hugo Antelo jugador, hoy su entrenador. Un buscador constante del gol, sin importarle demasiado el cómo y muy pendiente del qué. Y, se sabe, por lo general, el que la busca, la encuentra. De ese modo se tomó la revancha en el clásico cruceño y continúa adelante en la Copa AeroSur.
Tucho quiere eso de su Oriente 2009, un constante ir al frente, sustentado más en la inspiración de sus talentos que de otra cosa. Por eso insistió tanto por Joselito Vaca, que anoche le manejó el fútbol de su equipo y le aseguró el triunfo con una excepcional jugada: recibió cerca del área de Blooming con una zaga jugando en línea, todos esperaban su remate, pero él observó lo que nadie vio, el pique de Mojica al vacío, y le puso la pelota en bandeja para que defina y anoté el 2-0. Genial.
Y Oriente será así, dependiente de sus talentos antes que del juego armonioso y compacto de su equipo. Algunas veces le irá bien, otras no tanto, pero ese es el estilo de Tucho Antelo y su manera de entender el fútbol: ir al frente siempre con actitud.
El talento de Joselito le dio la luz necesaria a Oriente en determinados momentos y terminó dejando la sensación de que esta vez el cuadro albiverde fue más que el celeste, no tanto en juego, pero sí en convicción. Entró con una idea definida a la cancha y trató por todos los medios llevarla a cabo, en cambio, Blooming ingresó a ver qué hacía el rival para tomar decisiones. Cuando las tomó, era demasiado tarde.
El partido tuvo un quiebre a favor de Oriente con el gol polémico del paraguayo Cuéllar (¿no estaba adelantado?) en los descuentos de la primera etapa. Blooming se desconcentró, perdió la poca serenidad que tenía para administrar la pelota, empezó a dividirla y a perder las marcas, y con el tanto de Mojica se le hizo todo cuesta arriba. Además, Galarza estuvo en su noche y salvó un par de situaciones muy claras a favor de la Academia.
Oriente celebró con ganas. Después vino el shoot out, pero eso fue más una anécdota que otra cosa. Ahí ganó Blooming, pero el triunfo de verdad lo consiguió Oriente.

* Foto El Deber