Si calificamos la actuación de ambos, podríamos decir, como se acostumbraba en la época de colegiales, que Alva “pasó raspando” y Raymonda se fue a desquite.
El peruano es un delantero que se asocia al juego, un tanto movedizo, con presencia, pero que demostró no por nada no tiene chapa de goleador. Al comenzar el partido se le presentó una inmejorable oportunidad, y falló. Su remate, débil y recto, fue despejado por el golero Robledo.
El argentino participó poco del juego y se nota que le falta ritmo de competencia. Le costó sacarse las marcas, desequilibrar en el mano a mano, moverse rápido para tener espacio. Fue sustituido en el complemento.
Hugo Suárez volvió al arco en lugar de Alex Arancibia, que pagó la factura de las dos últimas derrotas. Fue uno de los mejores de los albiverdes.
Los juveniles Ronny Montero y Francisco Ágreda no desentonaron. Montero es fuerte y expeditivo. Ágreda tiene técnica y es dinámico.
* Foto diario La Razón.
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