Oriente encontró la tranquilidad a punta de victorias. Ayer sumó su segundo triunfo en el torneo y despejó los nubarrones que presagiaban conflicto a raíz de un par de derrotas iniciales y consecutivas.El estadio Hernando Siles, convertido en un teatro de pesadillas en los últimos tiempos por ser escenario de caídas dolorosas y vergonzosas, esta vez fue el lugar donde encontró el sosiego que buscaba, gracias a su victoria ante La Paz FC.
El gol de Ronny Montero, un juvenil que trata de ganarse un lugar en la zaga aprovechando algunas bajas en el sector, le permitió ponerse en ventaja en el primer tiempo, y al final le fue suficiente ese tanto para ganar.
Oriente fue una especie de equipo utilitario. No fue defensivo, pero se agrupó en defensa aprovechando la parsimonia de La Paz FC, y tampoco se esmeró en llegar seguido al arco contrario, sin embargo, trató de aprovechar al máximo las jugadas con pelota detenida. (Así llegó el tanto de Suárez: pelota al área de Mojica en un tiro libre desde la izquierda, Meleán baja la pelota de cabeza, tras mala salida del golero Torrico, y Suárez la empuja al gol).
Al final La Paz FC se perdió un par de goles. Y Oriente se quedó con el triunfo. Segundo al hilo. Como para que no le pregunten por un tiempo a Ramacciotti si no piensa renunciar.
Los triunfos traen la felicidad y también calman los nervios. Por eso, Oriente, ahora, está en paz.
*Foto diario El Día.
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