lunes, 8 de abril de 2013

VA DE RETRO

Neymar-Melean-Bejarano-Bolivia-Santos_LRZIMA20130406_0074_4Brasil volvió a Santa Cruz después de casi treinta años para medirse con Bolivia. Y tras lo visto en el Tahuichi Aguilera el sábado, uno podría darle la razón a quienes sostienen que el tiempo pasado fue mejor.
Suficiente con ver los nombres de los protagonistas y compararlos con los que estuvieron en el estadio cruceño hace casi tres décadas atrás.  La diferencia de jerarquía es enorme. Hoy los denominados cracks son  una excepción, antes abundaban, en uno y otro equipo, ni que se diga en Brasil.
Los brasileños habían estado por única vez en junio de 1985, para enfrentar al equipo nacional por las eliminatorias del Mundial de México 86, en las que Bolivia ofició de local en Santa Cruz. Vinieron para la Copa América del 97, es cierto, pero no enfrentaron a Bolivia en el Tahuichi.
Brasil tenía un equipazo, con Zico, Toninho Cerezo, Junior, Leandro, el doctor Sócrates, Casagrande, Eder y Edinho. Zico, Sócrates, Toninho Cerezo y Junior están, sin duda, entre los mejores jugadores brasileños de la historia.
Los brasileños ganaron 2-0 con goles de Casagrande, un atacante que le hacía honor a su apellido, un grandote que triunfó en el Torino de Italia, y que aprovechó dos contragolpes para liquidar a Bolivia.
Hubo gran revuelo por la “herejía” del entonces presidente de la FBF, Edgar Peña Gutiérrez, de hacer jugar a la selección boliviana en otro lugar que no sea La Paz, y, peor aún, en Santa Cruz. No era una idea descabellada si se tiene en cuenta que la base en aquel entonces era Blooming (trece de sus jugadores fueron convocados) y varios de Oriente Petrolero.
El equipo nacional formó así: Luis Galarza, Jhonny Herrera, Coimbra, Noro, Roberto Perez; Milton Melgar, Edgar Castillo y Erwin Romero; Roly Paniagua, Juan Carlos Sánchez y Silvio Rojas. Solo Galarza, Pérez y Romero no jugaban en Blooming.
Nombrar a Melgar y Romero marca una gran diferencia con la actualidad. Romero había destacado en Quilmes de Argentina y Melgar estaba por hacer historia nada menos que en Boca y River. Los que ocupan sus lugares están a años luz de lo que eran ambos.
También eran palabras mayores Galarza (papá de Sergio), el gran goleador Sánchez y Rojas. El resto no desentonaba y había dos por puesto (Saldías, Avila...).
Hoy Bolivia extraña jugadores de esa jerarquía. Por eso, en vez de avanzar, el fútbol boliviano retrocede. No por nada hace treinta años Brasil nos ganó por dos goles de diferencia, y ahora nos hizo precio, nos superó por cuatro.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Lamentablemente esto es cierto, Me refiero a que se han perdido los jugadores de renombre de aquellas épocas, sin embargo, este retroceso es culpa de todos los que conforman el fútbol boliviano, pero quienes lleven la mayor parte tal vez sean los periodistas que no realizan su trabajo y se convierten en meros hinchas que cambian de opinión de acuerdo al color de su patrocinador por decirlo de forma elegante (Para muestra basta un botón, vean a Pasten que antes de que El tigre lo patrocine hablaba pestes de ese equipo sea o no verdad, sin embargo ahora que es uno de sus clientes, dice las cosas pero con un tono diferente, y como él hay varios), vemos un ejemplo claro a jóvenes "Periodistas" que descargan su furia reprimida como hinchas atacando a árbitros o a jugadores que no les caen bien o no son del equipo al que apoyan o que no les quisieron dar una nota y por ese motivo se convierten en punto directo de sus críticas, mal intencionadas en muchos casos, e hilan con un detalle tan fino que si uno de ellos comete el mínimo error, se toman todo el programa para hablar de eso.
Ahora, porque culpo directamente a los periodistas, porque ellos generalmente tienen la ultima palabra, es lo que ve la gente común, es lo que cree la gente que los ve o los sigue, si un periodista indica ese partido fue un fraude, probablemente después de un juicio o amague de juicio se retracte pero lo que el menciono ya fue comidilla de chismes y comentarios en la gente, y más aún el tono de esas palabras que dijo se acrecentó de boca en boca, lamentablemente los periodistas en la actualidad en general y en su mayoría también cambiaron, ya no están aquellos recordados y que ahora no se encuentran entre nosotros, simplemente quedaron los que imitan, y los que tratan de hacer del periodismo un negocio lucrativo.
Miren un poquito atrás y vean, que buen periodista fue adinerado? si lo fueron no fue gracias al periodismo, así que si nos toca repartirnos las ganancias que también nos toque repartirnos las culpas, el periodismo cayo hace mucho y no es la ayuda que el fútbol necesita hoy en día.
Sobre la hinchada, dirigentes, jugadores no se puede hablar, porque son, exitistas, muchos pechos fríos, aprovechados y todo adjetivo que se les quiera dar, sin embargo señores periodistas ustedes tienen una labor mucho mayor y lo peor es que no se pueden equivocar en lo que dicen o lo que escriben.
Espero señor once a once, empiece a generar el cambio, tal vez sus colegas no lo vean con buen ojo, pero así se empieza. Saludos y no sea un periodista más de los que agarro un blog y empezó a escribir lo que se le vino a la cabeza, o agarra un micrófono compra un espacio y empieza a transmitir. Saludos
Atte.

Fernando