jueves, 25 de febrero de 2010

CINCO Y CIRCO

La Selección de Bolivia no fue más que un circo. Anoche hizo todo para alegrarle la vida a su similar de México que trata de levantar el ánimo y su fútbol con la intención de realizar una gran actuación en el Mundial de Sudáfrica.
La carpa fue armada en el Candlestick Park, de San Francisco, Estados Unidos, y en un cuarto de hora la diversión estaba a pedir de boca de los mexicanos, quienes se deleitaban por las torpezas de unos pobres bufones de ocasión (perdón, muchachos...) que ni tenían un libreto aprendido.
Todo empieza con la payasada de algunos dirigentes que, muy circunspectos, cuentan el chiste de que todo es tomado con seriedad; sigue con la animalada de exponer a jugadores juveniles haciendo creer que hay "renovación"; y continúa con el malabarismo de presentar un equipo que de tal sólo tiene el nombre, arriesgándolo a pruebas difíciles y complicadas como a un torpe trapecista o equilibrista, pero sin la red que lo salve del porrazo.
No es serio improvisar con una Selección y vender el partido con la mentira de la renovación. Una cosa es renovación y otra muy distinta es improvisación, la solución pasajera y a la apurada para salvar un compromiso que a la vez generará unos pesos y brindará una nueva oportunidad para devolver favores a aquellos que apoyan gestiones con tal de la prebenda del viaje con casi todo pago.
Es una burrada armar un plantel con retazos para enfrentar a un rival que es cada vez más complicado, como México, y exponerlo al papelón, como ocurrió anoche, al igual que la última vez que se habían enfrentado y que acabó con idéntico marcador (0-5). Es un error presentar un equipo que casi ni entrenó, con bajas, y con jugadores juveniles como Gilbert Álvarez y Gonzalo Galindo, que ni siquiera tienen competencia seria en la cual hayan demostrado que están para la Selección mayor.
Arriesgar de esa manera, con una Selección que ni siquiera tiene un entrenador titular, exponiendo a un nuevo golpe al agonizante fútbol boliviano, es rayar en la imprudencia, en la irresponsabilidad, en la indolencia, en el cinismo, en la desvergüenza, en el masoquismo y en la falta de sentido común.
La Selección tiene que jugar, es cierto, y puede ser sparring, pero tiene que estar bien preparada para ello. Empezando por contar con un plan a mediano y largo plazo, apoyado por todos, Liga y FBF, y con un cuerpo técnico que planifique y cumpla etapas.
Anoche, jugó por jugar y así le fue. El gran beneficiado fue México, que levantó el ánimo goleando, y el gran perjudicado Bolivia, que en algunos momentos dio risa y en otros, pena.

* Foto de yahoo noticias

No hay comentarios: