Así es el fútbol, Martins. El héroe del pasado puede ser el villano del presente. Por eso pasaste de los elogios desmedidos a las críticas exageradas, de los aplausos a rabiar a los insultos sonoros, de la valoración de tus cualidades a las dudas sobre tu verdadero potencial futbolístico.
Fallar un penal es una desgracia que le sucede a cualquiera, aunque la gente no lo entienda o le cueste entenderlo porque la pasión y la bronca por la oportunidad perdida nos nubla, y no permita recordar que hasta consagrados considerados genios de la pelota como Maradona, Zico, Platiní (el francés y el camba, los dos), Sócrates, etc., etc., marraron penales decisivos.
Incluso Pelé falló uno acá, en Santa Cruz, cuando el famoso Santos visitó Bolivia y enfrentó a Oriente Petrolero, en 1971. Aquella vez, O' Rey se paró frente a la pelota ante el arquero paraguayo Ladislao Jiménez, y desvió el remate.
Ayer no era tu día. En el penal, le pegaste muy abajo a la pelota, por eso se te fue por arriba del travesaño. Después, todas las pelotas te quedaban incómodas y tampoco te dieron un pase como la gente. Y por si fuera poco, te expulsaron.
Además, creo, extrañaste a Botero, que se despidió de la Selección. Que te encuentren un socio rápido y que el equipo te ayude un poco. Otra vez será.
* Foto sportsya.com
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